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El mundo «on line» que nos espera
No cabe duda que una de las consecuencias inevitables que nos traerá la pandemia será el aislamiento social. Esto, como es lógico, afectará directamente al comercio y a los negocios. Pero en contraparte, afortunadamente contamos con la tecnología necesaria para que esto pueda ser en alguna manera superado. Los actuales medios de comunicación virtual (principalmente la Internet) nos ofrecen hoy un sinnúmero de posibilidades que vamos a tener que emplear al máximo para compensar las carencias del contacto “directo” con los clientes y proveedores.
Por lo pronto, diversas aplicaciones nos brindan la oportunidad de establecer contactos virtuales sustituyendo de ese modo las famosas reuniones de información. Todos los protagonistas, desde directores de marketing hasta creativos en el caso de la publicidad, pueden participar sin límites de tiempo ni espacio. Bastará para ello contar con un simple celular lo suficientemente operativo. Además medios como el Whatsapp nos dan la facilidad de obtener las indicaciones, observaciones y correcciones en tiempo real, a lo cual se suma el correo electrónico.
Donde sí existen mayores dificultades es en la elaboración de los mensajes, en especial los spots televisivos, que requieren la participación de los realizadores y de la producción. Para ello será necesario que estos negocios afinen bien sus estructuras y métodos a fin de que se adecúen a las exigencias de la prevención sanitaria y a la velocidad que imponen las facilidades de la comunicación. Para ello lo más probable es que se recurra aún más al diseño digital y a las animaciones que a la fecha se presentan como una buena alternativa a las escenas reales. Asi mismo, las activaciones de BTL serán de forma virtual y la creatividad se tendrá que apoyar en la tecnología para poder atraer a grandes públicos en plataformas virtuales como ferias educativas con moderadores famosos que lideren el evento o pequeños juegos virtuales por parte de las marcas que añadan nuevas experiencias al consumidor.
Finalmente el tercer elemento a considerar serán las redes sociales, que serán la forma de comunicación masiva más importante en el futuro. Esto tiene la ventaja que los costos tradicionales se reducirán a casi nada comparativamente con el ATL, además que se evitarán las largas negociaciones con los medios haciendo que los mensajes tengan una difusión cada vez más inmediata.
Como se dice comúnmente, las dificultades también son oportunidades, y estar siempre atentos a los cambios es algo necesario e imprescindible.